Para solicitar una beca por mérito es muy sencillo, basta con envíar un correo electrónico a la oficina de admisiones de la escuela. Personaliza tu mensaje para que la oficina de admisiones no piense que está recibiendo una carta de formulario, y da la impresión de que la escuela es tu principal opción.
Necesitas transmitir el mensaje de que realmente amas la escuela y solo quieres ser aceptado por ella. Pero lo que te frena es el dinero. Lo ideal es que tengas una oferta de otra universidad que puedas utilizar como palanca. Si es así, asegúrate de incluir la documentación en tu correo electrónico.
Si no es así, puedes hacerles dudar sobre tu inscripción diciendo que puedes ir a una escuela estatal local que cueste menos. Si no hay opciones más baratas, no está de más intentarlo. Sólo tienes que decirles que no estás seguro de poder hacer frente a los costes, sobre todo en las circunstancias actuales.
Preguntar si hay otro tipo de becas universitarias o de mérito a las que puedas optar como una buena manera de conseguir un mejor financiamiento, sobre todo si no tienes ofertas competitivas u opciones más baratas con las que negociar.
¿Qué hacer después de conseguir una beca?
Si consigues una ayuda financiera adicional o una beca, asegúrate de aclarar si el dinero es renovable o no.
Por lo general, la ayuda financiera basada en la necesidad se solicita cada año, mientras que el dinero de las becas tiende a ser renovable siempre que se mantenga un determinado promedio de calificaciones y carga de créditos.
Edmit y SwiftStudent de FormSwift ofrecen plantillas gratuitas para ayudarte a escribir una carta de apelación. Y, en TuitionFit, puedes comparar tu oferta de ayuda financiera con las ofertas que familias similares han recibido de las universidades a las que solicitaron, de modo que puedas comparar los precios reales y utilizar esa información para ayudarte a negociar un mejor acuerdo.